martes, 21 de diciembre de 2010

"La jubilación anticipada es un despido vestido con traje de domingo"

viernes, 17 de diciembre de 2010

EL INTERRUPTOR DE LA VIDA (2ª PARTE)



El mundo civilizado es muy injusto. Por un lado, matamos la vida en potencia que crece en nuestro interior, y por otro lado, mantenemos con vida, a personas cuyo tiempo ya ha se ha agotado. Y es que la medicina puede llegar a ser bastante cruel, a veces no es capaz de curarnos, pero si de mantenernos artificialmente con vida.

Haciendo un discurso un tanto demagógico, podemos preguntarnos cuanta gente en el tercer mundo muere por malnutrición o por consumo de agua no potable, y a cuantos de ellos podríamos salvar con lo que cuesta mantener artificialmente, a una persona en coma profundo.
La eutanasia en un tema controvertido. Por suerte o por desgracia, hasta hace relativamente poco, la gente no tenía que plantearse este dilema moral. Las personas se curaban o morían, pero no había una situación intermedia, en muchos casos inhumana, en la que el desenlace se aplaza pero donde no parece haber solución posible.

Hay que distinguir entre el suicidio asistido y la eutanasia. En el primero, el paciente está imposibilitado fisicamente para terminar con su vida, y en uso de sus facultades, pide ayuda a otro para que le mate en su nombre.
En el segundo caso, el paciente no pide ni que le maten, ni que le mantengan con vida, simplemente, porque ni siquiera sabe que está vivo.

Así que la ética, la moral y las leyes deben replantearse nuevas situaciones cada día. Distinguir lo que es delito de lo que es miseriocordia, analizar casos y situaciones concretas donde un milagro no le parece probable, ni al más optimista.
Y es que nuestro afán por sobrevivir, y nuestra negativa a resignarnos a nuestra suerte, nos ha convertido en unos dioses de pacotilla. Jugamos con el fuego de la clonación, creamos máquinas que respiran y laten por nosotros, y a lomos de una medicina aún joven y desbocada, le hacemos un requiebro a la muerte.
Pero en algunos casos, la muerte queda atrapada entre nosotros y lo que significa una vida digna, es un muro infranqueable, una instantánea detenida en el tiempo, sin futuro, sin retorno, sin final feliz.

viernes, 10 de diciembre de 2010

EL ANZUELO



Una táctica militar cuando alguien quiere iniciar una guerra, es provocar una situación en la que el oponente sea quien ataque primero, y así tener la excusa perfecta para repeler la acción e iniciar la verdadera ofensiva.


El pasado 3 diciembre los controladores aéreos españoles comenzaron una huelga encubierta que terminó un día después con el cierre del espacio aéreo español. Esto obligó al gobierno a declarar el "estado de alarma" en el país, por espacio de quince días; un hecho sin precedentes en la democracia española. Se decretó la militarización del espacio aéreo, lo que hizo que los controladores pasaran a recibir órdenes directas del ejército.
El tráfico aéreo se reestableció totalmente el 5 de diciembre.

El conflicto con los controladores aéreos es una asignatura pendiente que no ha sabido resolver ningún gobierno, desde hace ya muchos años. El poder de este colectivo en las negociaciones laborales, les ha permitido obtener unas ventajas económicas, de horario y autogestión, escandalosamente buenas.

Pero ¿Por qué ha estallado el problema ahora?. El 3 de diciembre, en víspera de uno de los puentes festivos más largos del año, el gobierno lanzó una provocación en forma de decreto ley, en él se decía que ya no se consideraban horas trabajadas una serie horas que hasta entonces lo eran, y que hacía que muchos controladores volvieran a situarse por debajo del cómputo total de horas anuales establecidas.

¿y qúe hicieron los controladores? Pues morder el anzuelo.

Abandonaron masivamente sus puestos de trabajo y se dispusieron a presionar para que el gobierno diera marcha atrás al decreto.

Pero el gobierno ya tenía la excusa que quería, los controladores habían reaccionado como cabía esperar, y respaldado por la opinión pública y los más de 600.000 afectados, inicio la verdadera ofensiva.

Los controladores tienen ahora un nuevo frente abierto, responder ante la justicia del caos que originaron en el país. Además su posición ventajosa en futuras negociaciones, se ha visto significativamente mermada.
El gobierno actuó con rapidez y decisión, aunque algunos le acusan de no haber convocado las 150 plazas de controladores que prometió a principios de año.

Lo más triste de todo esto, es el verdadero motivo por el que el gobierno se ha impuesto ante el conflicto. La política económica de ZP, deja mucho que desear desde que se inició la crisis económica, ya que para lo que muchos paises es recesión, para nosotros es caída libre.
Zapatero sube impuestos, recorta gasto social..., pero todo lo hace tarde y mal. No tiene un plan estratégico global e improvisa y da marcha atrás constantemente.
A finales de noviembre anunció la próxima privatización parcial del gestor de aeropuertos nacional (AENA) y de las loterías del Estado, es decir, pan para hoy y hambre para mañana. Pero claro, para poder vender, primero hay que sanear..., ya empieza a cuadrar el conflicto con los contoladores.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Los primos, son esos parientes con los que uno convive de pequeño, y que luego desaparecen de tu vida.

miércoles, 21 de abril de 2010

LA AMISTAD


Eran dos, si;
pero eran iguales.
Sus ilusiones y sus vivencias
tejían ovillos que les ataban,
pero los hilos formaban
tal embrollo,
que era difícil separarlos,
y no se sabía ya
quien ató a quien,
o quien hizo al otro
a su imagen y semejanza.


Tal vez, en la lenta elaboración
de la conversión,
ambos se acercaban
y ambos cambiaron.


Pero la complicada tela
de araña,
levantada como un castillo
en el aire,
era débil.


Y el mas leve soplido
soltó los dos cuerpos.

miércoles, 14 de abril de 2010

EL DILEMA


¡Piensa!

¿Cuándo fue la última vez que alguien te contó un secreto? ¿Cuántos secretos de otras personas albergas en tu alma? ¿A caso nadie ha confiado en ti jamás? ¿Y tú? ¿A quien le cuentas los tuyos?.

Guardar un secreto es tan difícil... la tentación de contárselo a alguien es tan grande... Cuando nos confían un secreto, debemos escuchar, alegrarnos de que esa persona nos tenga en tan alta estima y olvidar. La información se deposita en nuestro corazón como un ancla que baja hasta el fondo, y ahí es donde debe permanecer, bajo las aguas del recuerdo.

Pero en determinados momentos la tentación de desvelarlo es muy grande. Queremos levar anclas y hacer zarpar el barco de nuestra traición.
Nos engañamos pensando que sólo se lo vamos a contar a una persona, y además con pocos detalles, pero generalmente acabamos dando pelos y señales y repitiendo el hecho varias veces como si no hubiera quedado claro. Con un poco de suerte, hasta lo completamos con nuestras sospechas, comentarios y opiniones, que ya casi hasta hay argumento para hacer una película.
Todo comienza con el siguiente susurro: "No se lo cuentes a nadie, pero me he enterado de que..." En ese mismo momento sonreímos por dentro, nos sentimos importantes, somos conocedores de algo que los demás no saben, y en ese mismo momento también, le pasamos el dilema moral a nuestro interlocutor: "¿Lo cuento o no lo cuento?. Y así sucesivamente, hasta que alguien deja de irse de la lengua, o hasta que se cierra el círculo porque el secreto a voces llega a oídos del interesado.

Mas difícil que saber guardar los secretos de los demás, es encontrar a alguien que sepa guardar los nuestros. Alguien que los proteja de por vida, que los meta en un recipiente tal que no se degrade jamás. En una caja fuerte tan segura, que nadie la pueda abrir al oír el tintineo del secreto que quiere salir y propagarse. Que el secreto vaya literalmente con él hasta la tumba, y que incluso ahí, nadie sea capaz de desenterrarlo.

¿Cuantas personas en el mundo crees que hay así? Seguramente son menos de las que nos pensamos. Pero las hay, y esas personas si que merecen la pena.

lunes, 29 de marzo de 2010

EL INTERRUPTOR DE LA VIDA (1ª PARTE)



El aborto es un asesinato.
Podemos llamarle "interrupción voluntaria del embarazo" para sentirnos mejor, podemos decir que es un derecho de la mujer, podemos establecer un periodo en el que consideremos que ese ser no es una persona, podemos convertirlo en el estandarte del feminismo, hasta podemos asemejarlo a quitarnos una muela, pero al final, le damos la espalda a la verdad.

En determinados casos estoy de acuerdo con que se practique, de igual manera que justifico un asesinato en defensa propia, aunque no se me ocurriría llamarle a eso "interrupción voluntaria de la vida":
Usted ha matado a esa persona porque no le ha quedado otro remedio, porque él le ha atacado a usted o a su familia, la justicia le absuelve del delito por estar justificado, pero no utilicemos eufemismos para que se sienta mejor. Usted sabe, la justicia sabe y la sociedad sabe que se ha visto obligado a cometer ese acto, pero la realidad es que le ha arrebatado la vida a otro ser humano, y que tendrá que vivir con ello.

Yo me alegro de que en nuestro país se haya legislado el aborto, y creo que el tercer supuesto de la Ley, es un coladero que permite hoy en día abortar a cualquier mujer sin ningún problema.

Pero ahora se va mas allá, los defensores del aborto quieren quitarle importancia a este hecho, nos lo adornan diciendo que una simple "elección de la mujer". Quieren disipar de nuestras conciencias cualquier sensación de culpa. Y eso es precisamente lo que mas me preocupa.
El día que la gente aborte, y salga del hospital como a quien le quitan el apéndice, el feto no sé, pero la sociedad será un poco menos humana.

Yo no les deseo eso a mis hijos, quiero inculcarles que en esta vida todo tiene consecuencias: si tengo relaciones sexuales me puedo quedar embarazada o dejar embarazada a la otra persona, si aborto, estoy matando una vida que empieza, si cojo el coche borracho puedo ocasionar un accidente, si me drogo arruinaré mi vida... Quiero que tengan principios y valores y que huyan de la cultura del "todo vale" porque el político de turno ve un filón en una idea.

miércoles, 17 de marzo de 2010

SER O NO SER

Picasso - Niña frente al espejo



La persona es parcialmente el resultado de las demandas de la sociedad, y por otro lado, es el arreglo entre lo que uno quiere ser o como uno quiere aparecer. Sin embargo esta no es la verdadera personalidad, a pesar de que todo parece muy real y honesto; pero no lo es.

El modo de actuar está bien, si se sabe que uno no es idéntico a la forma que aparenta.


Carl Gustav. Jung (1875 - 1961)

martes, 9 de marzo de 2010

LA DIETA




Amo el dulce por encima de todas las cosas. En mi opinión, el azúcar es la verdadera "sal de la vida". Ahora que he empezado un régimen por enésima vez, soy consciente de que desde el inicio, la batalla está perdida.
El placer de subirme a la báscula cada mañana para ver menguar los dígitos, empieza a darme menos satisfacción que la posibilidad de tomar un buen chocolate hecho.
Cada mañana, cuando voy a la panadería a comprar el pan que ya no como, hay unos bollos dentro de la vitrina que me provocan. Lo sé, sólo yo los oigo, pero entre burlas me preguntan cuanto tardaré en caer, yo finjo que no me importa, pago el pan y me doy la vuelta.
Desde que tengo hijos he vuelto a descubrir el placer de la nocilla, ahora no, claro, pero hasta hace unos días me comía los restos que quedaban en el cuchillo, y si no eran suficientes, volvía a untarlo otra vez. Después miraba las calorías que tiene la nocilla por cada 100 gr. y una sensación de culpa de 5 segundos invadía mi alma.

No sabría decir que es lo que mas me gusta..., digamos que hay un dulce para cada ocasión. La repostería me relaja y es mi gran afición. Adoro las tartas y los pasteles. Prefiero la nata a la crema, aunque a todo le hago aprecio. La bollería, los postres caseros, los bizcochos, las magdalenas, los merengues, las yemas, las pastas, los hojaldres, las palmeras de chocolate y las gominolas son mi perdición. El chocolate que mas me gusta es el que se materializa en bombón, y si tiene avellanas o almendras todavía mejor. Cuando abro una caja de bombones, primero me como los que mas me gustan, luego los que me gustan menos, y tras abrir y cerrar la caja unas cuantas veces, desaparecen todos.
Eso sí, odio el "after eight", mezclar la menta con el chocolate me parece una monstruosidad. Tampoco me gustan las frutas confitadas aunque las recubran del mejor chocolate. Una de mis mayores debilidades aunque a muchos pueda sorprenderles, son "los huesos de santo". De una sentada me como una bandeja entera. Cuando se aproxima noviembre y al pasar por una pastelería los veo, empiezo a sonreir, y siempre me pregunto: ¿Bandeja pequeña o grande?.
Para mí, cualquier restaurante que se precie, tiene que tener buenos postres. Porque yo por muy llena que esté, siempre tengo un hueco en el estómago para él. Cuando llega la camarera con la libreta amarillenta y se limita a decir: Helado de vainilla, queso, fruta del tiempo y yogur, mi hueco del postre, se cierra en banda. ¿Y para decir eso tiene que apuntarlo?.
Sin embargo, cuando en la carta del restaurante los postres llaman mi atención, empiezo a imaginarme la comida en orden inverso.
Así que ante ustedes me confieso, el dulce es mi gran pecado, mi perdición. Yo no fumo, no tomo drogas, apenas bebo y no tengo vicios, pero eso si, confieso haberme comido las gominolas de mis hijos en mas de una ocasión... pero es por su bien ¿eh?..., eso que quede claro.